Esa minúscula taberna no tiene nombre, su dueño tampoco. Sin embargo, en el barrio de Shinjuku, todo el mundo los conoce. Abierta desde las doce de la noche hasta las siete de la madrugada, acoge a los noctámbulos de Tokio: boxeadores, prostitutas, actores porno, policías y yakuzas acaban allí para tomar caldo, ramen o sopa de miso, según lo que haya en la cocina. Cada plato da lugar a un encuentro, una historia.
Desamores, reencuentros inesperados, anhelos o frustraciones: se cuece de todo en esta pequeña tasca donde los clientes vuelven una y otra vez, ya sea para celebrar el Año Nuevo con su pareja, para ahogar su pena en sake o por un súbito antojo nocturno de curry con arroz.
'La cantina de medianoche' es un éxito en Japón, donde se han producido dos películas basadas en el manga, que también tiene serie televisiva en Netflix con el título 'Midnight Diner: Tokyo stories'.