En el otoño de un 1950 lluvioso y sombrío, Berta, una muchacha de diecinueve años, llega a Madrid para trabajar como manceba en la farmacia de un tío suyo al que no ve desde hace años. Lo hace tratando de escapar de un ambiente opresivo, pero lo que encontrará con esa nueva familia, de la que en realidad sabe muy poco, será aún más atroz.